El ciclismo es una modalidad deportiva que sigue ganando seguidores en todo el mundo. Es un deporte muy versátil y divertido que se practica tanto en grandes competencias, como en momentos de recreación. Algunas versiones aseguran que desde el Antiguo Egipto ya se usaba la bicicleta, pero no hay informaciones oficiales al respecto.
De acuerdo a distintas investigaciones, el ciclismo tuvo sus primeras apariciones en Alemania en 1817 y se conocía como “caballo de diversión”. Sin embargo, las primeras competencias oficiales de las que se tiene registro se dieron a partir de 1870 en Italia.
La primera carrera oficial, se llevó a cabo desde Florencia hasta Pistoia en Italia, con un recorrido de 33 kilómetros. El ganador fue el ciclista estadounidense Rynner van Neste.
Ese fue el primer paso del ciclismo profesional que permitió que este deporte de dos ruedas se practicara de manera oficial. Ya en el siglo XX las carreras se hicieron más formales y se dividieron por etapas, con el fin de aumentar los tramos y rutas en cada recorrido.
Las carreras más importantes del ciclismo
Desde el siglo XX se fomentó la práctica del ciclismo como deporte y profesión que dieron paso a las carreras más exigentes del mundo. Los participantes empezaron a prepararse con antelación para competir con los más destacados ciclistas del mundo, con una meta clara: llevar el nombre de sus países a los más alto de los pódiums mundiales.
A continuación, te dejamos las competencias de ciclismo más importantes del mundo.
Tour de Francia
Reconocida como la carrera más importante del mundo, se inauguró el 1 de julio de 1903. Su recorrido es extremadamente exigente y allí se dan cita los más aguerridos ciclistas que finalizan la competencia en los Campos Elíseos.
Giro de Italia
El Giro de Italia es la segunda competencia más importante del mundo. Se realiza desde 1909 con importantes recorridos, etapas de montañas y pruebas contrarreloj que demandan un gran esfuerzo físico de los participantes.
Vuelta a España
Así como Francia e Italia, España también alberga una de las competencias más importantes del mundo. Se disputa desde 1935 y es reconocida por incluir en su recorrido la subida al Anglirú, una de las pruebas más arduas que pueden asumir los ciclistas en sus distintas etapas.