El ciclismo artístico es uno de los deportes más arriesgados y originales que existen. Aunque en algunas partes del mundo esta práctica es desconocida, en Europa, Asia y Norte América es muy reconocido y practicado. Para este deporte se necesita de una bicicleta especial para hacer las acrobacias y tiene diferentes categorías desde individual hasta equipo de 4.
Uno de los más destacados deportistas de esta disciplina y que se arriesgó a probar una manera distinta de montarse en una bicicleta, fue el estadounidense Edward Nicholas Kaufmann. Con el ciclismo artístico cautivó a propios y extraños con una bicicleta muy parecida a los modelos actuales, aunque con algunas innovaciones.
Kaufmann, llevó su pasión por este deporte de dos ruedas a otra dimensión. El estadounidense de origen suizo creó el primer campeonato del mundo de ciclismo artístico. De esta forma, mostró al mundo una manera distinta de pedalear. Con este deporte se baila, se vuela, es un arte en movimiento.
¿De qué se trata el ciclismo artístico?
El ciclismo artístico es más que realizar acrobacias sobre una bicicleta de piñón fijo. Los deportistas pueden participar solos o en pareja y deben hacer una serie de círculos concéntricos de 0,5, 4 y 8 metros sobre la pista de 14×11 metros. Los ejercicios se llevan a cabo durante cinco minutos y los deportistas deben cumplir con una serie de exigentes reglas.
Los jueces se encargan de evaluar de forma minuciosa a cada competidor. Allí supervisan la originalidad y dificultad de cada uno de los movimientos realizados en la competencia.
Control, disciplina y aguante
Practicar el ciclismo artístico requiere de mucha entrega como son el control corporal, equilibrio y aguante. Este deporte es muy exigente y se necesita de mucho entrenamiento, así como paciencia y disciplina para poder dominar cada una de las técnicas. Cada uno de los movimientos son muy arriesgados y para dominarlo se requiere de concentración.
La subcampeona del mundo de esta disciplina deportiva, Viola Brand dijo que durante la práctica del ciclismo artístico se requiere de mucha fortaleza mental. La atleta alemana indicó que durante una competencia no se puede cometer ni un solo error, ya que la diferencia entre ganar y perder se puede decidir es cuestión de un segundo si se pierde la concentración.