Consumir alimentos saludables es fundamental para la longevidad del ser humano. La mayoría de personas creen que una dieta sana tiene un elevado costo, sin embargo, es esto no es cierto.
Deberías pensar en añadir a tu lista de ingredientes para tu dieta, algunos alimentos sanos, los cuales mejorarán de manera drástica tu calidad de vida, y que además, pueden ser muy deliciosos.
Diferentes alimentos saludables ideales para tu dieta sana
Algunos de los alimentos saludables que están recomendados para llevar una dieta balanceada, son los que se mencionan a continuación:
Naranja: tiene un elevado contenido en vitamina C, y así como otras frutas cítricas como las mandarinas, los limones o las toronjas, las naranjas contienen terpenos y polifenoles, que son las moléculas principales de los frutos cítricos.
Cuentan con la capacidad para bloquear el desarrollo de tumores. También, potencian las propiedades anticancerígenas de otros alimentos, como verduras y frutas, incrementando su concentración en el torrente sanguíneo.
Aceite de oliva: previene las enfermedades cardíacas. Muchas personas usan casi a diario aceite de oliva, bien sea como aderezo de ensaladas o para cocinar. No obstante, pocos se dan percatan de sus beneficios.
Previene afecciones del corazón, la demencia, los accidentes cerebrovasculares, así como el cáncer del tracto digestivo superior, de las vías respiratorias y de mama. También disminuye el riesgo de diabetes y osteoporosis.
Atún: para la mayoría de personas es desagradable el olor del atún enlatado. Sin embargo, existen otras maneras de preparar este alimento saludable, desde asarlo en la parrilla, hasta comerlo crudo, sin dejar ese olor poco agradable. Ideal para una dieta sana.
Aguacates: este alimento es rico en fibra y antioxidantes naturales, lo cual puede reducir el estrés oxidativo que está presente en el cuerpo humano, batallando de manera activa para enfrentar las enfermedades cardiovasculares.
Además, los aguacates tienen alto contenido de vitamina E, que ayuda a prevenir el prematuro envejecimiento de las células de la piel, permitiéndote conservar una piel brillante, tersa y joven.
