Así como la higiene personal es importante, también lo es la higiene de los alimentos, ya que representa uno de los aspectos fundamentales para que logres un óptimo estado de salud.
Cuando no se pueden manipular los alimentos adecuadamente, se pueden contaminar y transmitir algunos microorganismos como parásitos, hongos y bacterias. El inadecuado manejo de ciertos productos químicos como detergentes, herbicidas, insecticidas y demás tóxicos, es otra fuente de enfermedades que pueden generar contaminación de los alimentos.
Ingesta de alimentos fuera de casa
En la actualidad, es muy común la ingesta de alimentos fuera de casa, lo cual puede ocasionar enfermedades estomacales e intestinales graves, debido a la una buena higiene de los alimentos y a la manipulación no adecuada de los mismos.
Conoce algunos hábitos básicos para una adecuada higiene de los alimentos
Los distintos hábitos a practicar para una adecuada higiene de los alimentos, realmente son simples; entre ellos están los siguientes:
- Antes de la preparación de los alimentos debes lavarte las manos con jabón y agua, así como también antes de consumirlos.
- Evita ingerir alimentos que preparen en las vías públicas. Y si tienes que comerlos, observa si se cumplen las mínimas normas de higiene de los alimentos.
- No consumas o compres alimentos en establecimientos que no practican las normas de salubridad.
- Ingiere alimentos que estén bien cocidos. Especialmente las carnes blancas y rojas y el pescado, ya que muchas enfermedades alimentarias se contraen por el consumo de carnes crudas.
- Antes y después de la manipulación de los alimentos, es esencial lavar cualquier superficie y todos los utensilios que usarás en la preparación de las comidas.
- Al ingerir alimentos envasados o procesados, es importante tener en cuenta si los empaques no están rotos, oxidados, abombados o tienen abolladuras.
- Otra norma de una adecuada higiene de los alimentos, es no comprar o consumir aquellos que muestren evidencias de haber tenido contacto con animales. Así como aquellos que tengan protuberancias o que el contenido salga del envase con aspecto mohoso, viscoso o burbujeante, o que tengan extraños olores sulfurosos o fétidos.
- Para la preparación de los alimentos utiliza agua potable hervida previamente.
Éstas y otras recomendaciones, son importantes a la hora de conseguir una adecuada higiene de los alimentos, para su consumo saludable.
